Hoy haremos un pan diferente, las masas no tienen porqué cocinarse siempre en el horno. Al vapor adquieren una textura muy diferente que a mí me gusta mucho.
Es la misma receta que utilizo para hacer los baozi pero dándole forma diferente y sin rellenar.
200 grs de harina de repostería
100 grs de agua
10 grs de azúcar
2 grs de sal
5 grs de levadura fresca
Amasamos hasta que nos quede una masa fina y formamos una bola que dejaremos reposar 45 minutos.
A estos panes se les puede dar infinidad de formas. Yo os contaré la mía. Salen unos panecitos de bocado riquísimos. Se pueden hacer más grandes, sólo habrá que alargar el tiempo de cocción.
Cortamos porciones que estiraremos con el rodillo hasta dejarlas muy finas (yo las estiré con la máquina de hacer pasta). Las pintamos de aceite (o con manteca de cerdo si no tenemos colesteroles varios) y enrollamos formando un purito.
Con un cuchillo muy afilado y sin apretar demasiado para que no se chafen, cortamos cada purito a lo largo y lo abrimos.
Unimos las dos piezas y le damos forma como de una flor.
Ponemos cada panecito sobre un papel dentro de la vaporera. Separados porque crecerán en la cocción.
Cocer 15-20 minutos y este será el resultado:
Tal como están ya se pueden comer pero están mucho más ricos (y con bastantes más calorías) si los freímos en abundante aceite.
Bon profit!!!
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